Tipología de ministros (una aproximación)
Si le proponen ser Ministro de Estado, le sugerimos leer este artículo. A lo mejor lo ayuda en su decisión.
Si algo nos ha dado el actual gobierno es una cantidad mayor y una alta variedad de ministros. Los ministros son los brazos políticos de todo gobierno: proponen, defienden, comunican y protegen a los presidentes. A propósito del nombramiento de Ana Jara, y los rumores de cambio para después de 28 de julio, aportamos una tipología de los ministros. A lo mejor ayuda a entender tan sorprendentes nombramientos y licenciamientos.
1. Ministros tecnócratas. El conocimiento de cifras, el prestigio profesional y los contactos los lleva al gabinete. Pueden tener mucho poder, generalmente están en el Estado aunque el mercado es la divisa. Su economicismo lo aplican a todo, no siempre con los mejores resultados. Los medios siempre les dan una segunda y hasta tercera oportunidad.
2. Ministros familiares. Nombrados por la amistad del presidente (o de la familia presidencial), pueden ser tecnócratas, del partido o un buen amigo. Pero es su cercanía al presidente (o a quien lo supla) lo que los consolida. Reciben encargos extra-ministeriales.
3. Ministros políticos. Pueden ser del partido de gobierno (Humala ha tenido solo a tres), de un partido aliado (Perú Posible) o políticos independientes. Son cuadros con peso propio. Si conocen y son oportunos se hacen permanentes. Generalmente los tecnócratas (sean de su entorno u otros ministros) los mastican pero no los pasan.
4. Ministros sociales. Cada vez son menos sociales y actúan de acuerdo a los presupuestos más economicistas o tecnocráticos sobre todo del MEF. Si no tienen peso propio están bajo el vaivén de lo que diga el viceministro de Hacienda. Reciben las presiones sociales, pero el cómo responden no depende de ellos.
5. Ministros refundadores. Quieren acabar con todo lo que encontraron. Quieren innovar o cambiar todo: desde leyes orgánicas, funcionarios, el logos de los programas, hasta el color de las paredes. Son un peligro para la institucionalización y continuidad de las políticas públicas.
6. Ministros pasajeros. Son nombrados por circunstancias especiales o para misiones concretas. Evitan la candela política. Mantienen sus acciones estrictamente en los límites de las normas y reglamentos de cada ministerio. Calladitos cumplen, se van rápido, oportunamente y satisfecho con la mejora del currículo.
Agregaríamos más: “ministros militares”, “ministros fusibles”, “ministros silenciosos”, “ministros por error”, “ministros brevísimos”, “ministros antipáticos” y “ministros que no son”. Si alguna vez acepta ser ministro, si lo permite esta aproximación tipológica lo ayudará a saber cómo lo mirarán, cuánto lo valorarán y cuándo lo licenciarán.
(Publicado en Exitosa Diario, 24 de julio del 2014)