Un gobierno selfie
"...el modo selfie es la forma normal de gobernar de ministros y del propio Presidente: mirarse a sí mismos, de espalda al país y creyéndose ellos mismos su propio relato, sus cifras, sus reformas"
Indiscutiblemente, por ser tan inoportuno, será uno de los selfies más comentados después del mensaje de 28 de julio el que se tomó medio gabinete en pleno discurso del Presidente ante militantes del nacionalismo en Palacio de Gobierno. Un selfie ministerial se sumó al opaco mensaje del presidente Humala, un mensaje sin lineamientos a futuro, con cifras discutibles, con ausencia de autocrítica y sin comunicar acciones ante el decrecimiento alarmante de la inversión, los conflictos sociales o la reducción de la generación de empleo. Lo que simboliza es pésimo: un presidente al que sus ministros no respetan, no escuchan, no atienden.
El liderazgo tiene un peso clave en gobernabilidad refería el politólogo Manuel Alcántara hace poco en un seminario organizado por el Instituto de Estudios Políticos Andinos (IEPA). Y ese liderazgo tiene en lo simbólico un gran peso. Los gestos son muy relevantes en política. Solo por una impertinencia, al debate sobre los cuatro años de Humala y sus oportunidades perdidas se suma un punto más de decepción: el selfie de medio gabinete y un presidente que no concentra la atención de sus propios ministros. Que los ministros no entiendan la poca pertinencia de usar el Smartphone o la tablet para ‘selfiarse’ en medio del esfuerzo de Humala por sentar liderazgo ante sus propios seguidores, expresan su poca valoración de ministros por la política, el liderazgo y sus símbolos. ¿No advertían el efecto corrosivo en la figura del Presidente?, ¿se culpará a los medios de este ridículo ante el que cualquier otro presidente hubiese ya castigado quitando confianzas?
Esta escena penosa del selfie a espaldas del Presidente parece banal para algunos ministros. Preocupa ello. Porque a lo mejor el modo selfie es la forma normal de gobernar de ministros y del propio Presidente: mirarse y sonreírse a sí mismos, dándole la espalda al país y creyéndose ellos mismos su propio relato, sus cifras, sus ‘reformas’; ignorando adolescentemente las preocupantes situaciones y proyecciones que tiene el país. Un mirarse solo a sí mismos en un selfie que por mucho tiempo simbolizará el discurso y el quehacer del quinquenio de Ollanta Humala.
Publicado en Exitosa Diario, 30 de julio del 2015