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Dejar de ser pobres de verdad

Es necesario evaluar realmente cuanto ha ayudado a reducir la pobreza las políticas sociales del gobierno anterior; los resultados parecen que más programas y recursos no han aportado mucho a dicho objetivo. 

Publicado: 2016-08-25

La reducción de la po­breza está más asocia­da al crecimiento de la economía, a la amplia­ción del mercado laboral y a la inversión pública y privada y la generación de más em­pleo, que a los programas so­ciales estrictamente. 

La ministra de Desarrollo e Inclusión Social (MIDIS), Ca­yetana Aljovín, ha informado que durante el gobierno de Humala se crearon 31 pro­gramas sociales más; que en dicho ministerio el personal pasó de 3328 (2012) a 7939 (2016) servidores y que no hay una evaluación sobre los principales programas. Solo el Midis tiene un presupues­to de 4130 millones de soles y el conjunto de programas sociales del Estado es supe­rior a 12 mil millones de so­les. “Incluir para crecer” fue la filosofía oficial del ante­rior gobierno, que era una respuesta a la racionalidad y consenso de políticas pú­blicas que consideran que “crecer económicamente es la mejor estrategia para reducir sostenidamente la pobreza”. Desde el 2005 al 2011 la pobreza se redujo de 54% a 27%. Del 2011 al 2015 la reducción solo ha sido de 5%. Algo así de -1% por año. Que coincide -es cierto- con la declinación del crecimien­to económico, pero los voce­ros del gobierno anterior han expresado que la pobreza se ha reducido por la expansión de políticas y programas so­ciales. Esta premisa es la que debe ser evaluada. Es decir, cuánto realmente aportaron los programas sociales a la leve reducción de la pobre­za y cuánto se debió al creci­miento económico, que aun­que bastante menor que el quinquenio 2006-2011, ha­bría aportado a la reducción de la pobreza más que el es­fuerzo de los programas so­ciales (aumentados en núme­ro, presupuesto y personal).

Este balance (para una fu­sión, permanencia o mejora) de lo hecho socialmente du­rante Humala va más allá de una transferencia adminis­trativa de cargos. Es hacer un corte y evaluar con obje­tividad si estas políticas y es­trategias son o no el camino correcto a continuar. Lo im­portante es que los pobres salgan realmente de la po­breza, porque es fácil conta­bilizar con optimismo a cada peruano que tiene ingresos por encima de 315 soles men­suales (para considerarlo no pobre), pero esa línea es una estadística y no nos pueden decir que esos ya no-pobres se sientan y sean realmente no-pobres, no-excluidos o descontentos cada día. De­jar de ser pobre de verdad incluye, pero va más allá de los programas sociales y del propio Midis; ello tiene que ver con empleo, educación, infraestructura, productivi­dad, capital social y más.

Publicado en Exitosa Diario, 25 de agosto del 2016


Escrito por

Javier Barreda

Sociólogo PUCP, docente. Escribo. Ex Ministro de Trabajo. Ex- Vice de Promoción del Empleo y de Desarrollo Social. Director Editorial UNFV


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Búfalo de pradera

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